Ir al contenido principal

Vida con vida

Camila nació hace dos años atrás. Fue noticia en todos los diarios del mundo. Al nacer se comprobó que su estado era irremediablemente vegetativo. No era un caso que permitía una intervención quirúrgica, un transplante o el más complejo de los tratamientos. No. Los médicos fueron terminantes. Solo sobrevive, si es este el término correcto, conectada a un respirador artificial y mediante alimentación que se le suministra por conductos. La ciencia es categórica: Camila nunca podrá sonreir, comunicarse, hacer un gesto de cariño. Nunca sabrá que se llama Camila, ni que tiene una hermana y dos padres desesperados por su salud. Ella es producto de los avances, si es este el término correcto, de la medicina. Como bien señalaban las noticias, no muchos años atrás, bebes con estas caraceterísticas morían indefectiblemente. No podían ser mantenidos con vida. No existían los elementos tecnológicos para tal fin. Y, me pregunto: ¿Podemos decir que hoy si? ¿Camila esta "con vida"? Esta es la cuestión. La realidad es que estamos frente a un ser humano que nació en estado vegetativo y que sólo las habilidades de una máquina le permiten mantener sus signos vitales. Celebro y apoyo la sacralidad que significa la existencia de un ser humano y celebro también que se pelee por la salud de todo enfermo pero me pregunto: ¿Es esto estar con vida? ¿Se está luchando por su salud? ¿Puede decirse que Camila está enferma? Quizás podría afirmarse que Camila "sobrevive", como antes señalamos, pero ello no siempre significa que las condiciones en que lo hace permitan afirmar que realmente vive. ¿Que es vivir? Obviamente no pretendo una respuesta religiosa, sino científico-filosófica. ¿Dónde está el límite? Es evidente que los progresos tecnológicos adaptados a la biomedicina pueden convertir los remedios en una invasión terapeútica (y desalmada) al cuerpo del ser que se trate, y hacer de esa vida una no vida. ¿Y quién conduce esa invasión? ¿Y cuál es su costo? ¿Y quien lo paga?. El sufrimiento de los padres de Camila y de su hermana y sus consecuencias ¿justifica una vida sin vida?

Demos un paso más en el análisis. Quien toma la decisión de conectar los conductos y las máquinas respectivas para mantener con vida esta vida vegetativa, ¿está tomando la decisión correcta o está contribuyendo a la muerte de la vida digna y a prolongar una indigna vida?

Vivir es el espacio de tiempo que transcurre entre el nacer y el morir pero es muy dificil que podamos definir a la vida como ese espacio de tiempo que transcurre desde que un ser humano nace conectado a una máquina que solo prolonga su existencia hasta que la vida artificial se termine, pues ese es un ser que no vivió ni tuvo posibilidades de hacerlo.

Hacer sobre-vivir a Camila de esta manera no pareciera que es vivir, es sencillamente alterar artificialmente una vida que no es vida. Seguramente para los religiosos que creen en la vida eterna asumir que no es lógico que Camila continúe con vida artificial es sencillo ya que terminar con esta situación sería abrirle las posibilidades a Camila a su verdadera vida post mortem. Pero, irónicamente, veo más dificil la solución para aquellos que no creen en la vida después de la vida, y, de nuevo, la pregunta aca que hay que formularse es si Camila está con vida. Al final, de eso se trata, de valorar la verdadera vida con vida.




Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Para qué sirve Educar?

" Educar. (Del lat. educāre). 1. tr. Dirigir, encaminar, doctrinar. 2. tr. Desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o del joven por medio de preceptos, ejercicios, ejemplos, etc.. Educar la inteligencia, la voluntad ." Estas son las dos primeras definiciones que nos da el Diccionario de la Real Academia Española sobre la palabra "educar". Mucho se ha escrito sobre el sginificado del término. A mi criterio la educación es esencialmente un proceso de mejora de vida . Educar supone creer especialmente en tres verdades: 1) en el perfeccionamiento de aquel a quien se educa; 2) en su capacidad y deseo de aprender; y 3) en que la transferencia de conocimientos de quien enseña no es tal si no va acompañada por la elaboración propia de una reflexión de quien los recibe. Educar no es colmar un depósito de tecnicismos, conceptos y sapiencias ajenas sino que la verdadera educación, -y me refiero especialmente a la educación del menor pero apli

Salvar mi circunstancia para salvarme yo

José Ortega y Gasset es recordado, entre otras cosas, por una frase profunda y desafiante de su obra Meditaciones del Quijote: "Yo soy yo y mis circunstancia, y si no las salvo a ella no me salvo yo". Es bastante sencillo explicar el concepto de "circunstancia" yendo a la etimología del concepto ( circuntatia ) que apunta a lo que nos "circunda", es decir a lo que nos rodea, a nuestro entorno, a nuestra cultura, a nuestra historia. La circunstancia de un joven nacido en la jungla africana no es la misma que la del joven nacido en la península escandinava. Yo soy yo y "lo que me ha hecho así o lo que me sigue haciendo así" parecería querer decir Ortega. Y con esta poderosa primera reflexión de su frase nos deja una serie de dudas por responder: ¿Ortega me está diciendo que no soy yo, sino lo que la circunstancia hizo y hace de mi? Si esto fuera así: ¿soy realmente libre o las circunstancias son los barrotes de mi celda que no me han permitido

Tiempo y vida

No quiero acudir a una definición de diccionario.  Quiero definirlo yo. Estoy absolutamente seguro que vos que lees estas líneas también lo podés hacer. De algún modo todos sabemos lo que es el tiempo   Lo conocemos desde que nacemos. Antes de nuestro capacidad de hablar manejamos los tiempos. Al poco tiempo de nacer supimos qué significa “hora de comer” y poco después empezamos a saber “cuándo” era el momento de dormir y poco a poco fuimos conociendo los “momentos” de nuestros padres (comenzamos a tener una idea del tiempo cuando intuimos que ellos deben estar a nuestro lado o regresar a casa). Todo esto fue y es con-vivir con el tiempo y quien convive con nosotros es nuestro compañero.  Llegamos así a una característica que nos permite una 1er definición: el tiempo es un compañero de vida. Esta bien. Es un avance pero solo eso. No me convence por completo. El tiempo no es “alguien” que nos acompaña. Es más que eso. Está con nosotros pero en una forma diferente a la compañía. Obvio es