Ir al contenido principal

Entradas

¿La celda del paradigma o vale la alegría?

Debo reconocerlo. No descubrí el significado hasta bien pasada la vida. Estaría en mis 20 y pico cuando un día determinado mi interpretación de la palabra paradigma cambio. Hasta ese momento asimilaba el concepto a una idea de valor, de verdad, de objetivo. Sabia que etimológicamente el término se origina en una palabra griega que significaba "ejemplo" pero no mucho mas. Quizá fue  por eso que para mi paradigma era una palabra que me inspiraba respeto, aun sin entenderla. La tenia allá arriba, como esos libros viejos -bien encuadernados-, de la estantería mas alta, de los cuales leemos el titulo y nos inspiran solemnidad pero que no tenemos la mas puta idea de lo que hay adentro. Pues bien, fue por eso (y por esa curiosidad que la vida me puso de collar) que me puse a investigar. Y descubrí cosas interesantes que me hicieron crecer. Repasemoslas juntos:  1) El concepto de paradigma fue sumamente relevante en la ciencia (y lo sigue siendo). "Considero a los paradigmas co...

Sin correr

Hay etapas en la vida que no las vivimos, las corrimos. Teníamos claro la necesidad de acelerar. El hacerlo, ya por el solo hecho de convivir con la adrenalina a flor de piel y la velocidad golpeando el pecho, justificaba la acción y premiaba en secreto nuestro ego que feliz disfrutaba el esfuerzo de correr. Así trabajamos, estudiamos, entrenamos, intentamos amar y jugamos en el teatro de la vida que nos miraba de costado y con sonrisa cariñosa nos preguntaba algo que no escuchamos ni nos importo oír. Fue sadismo de juventud: nos daba placer apurarnos y cansarnos y sufrir. Queríamos ser perfectos, no tolerábamos el error y el colmar el deposito de nuestras cosas para hacer, tranquilizaba nuestro exagerado deseo de éxito "fast track". Éramos invulnerables y vertiginosos, hasta en nuestras decisiones estratégicas a futuro. Futuro que no entendíamos en su dimensión ni en su esencia pero que nuestra soberbia disfrazada de estratega intelectual nos convencía al oído con bellas pal...

El amor no se entrega

No me entrego desollada Me sorprendió. Fue como esos golpes que uno no espera y que te dejan sin aire, con la sensación confusa del dolor y el sabor amargo de no haber previsto ni el origen ni el destino. Pero Silvina Giaganti hace hablar hasta el dolor en este relato, en este ensayo, en este homenaje, en este himno al Amor que publicó en Página 12. Emociona y enaltece y con todo cariño y respeto, corta telarañas ideológicas que envuelve en papel de seda para arrojar con fiereza al tacho de basura. Y me gusta su valentía y me enseña su fuerza. Lo leí después del 14 de Febrero reciente y comprendí todavía mejor aquello que dijo Agustin: "Ama, y haz lo que quieras". Ahí va. Saborealo.   No sé si lo sabías pero cuando te vi parada en la esquina de Córdoba y Gascón se me alteró de golpe la composición del cuerpo. Estabas con tres amigos y tenías una botella de cerveza chica en la mano, yo llegué y me paré a la izquierda de la entrada de Dasein, hasta que te acer...

Valores Morales y valores Religiosos: caminos distintos para el viaje de la vida

Partamos de la base que el ser humano tiene como deseo primordial vivir bien y mucho... Eso lo compartimos casi todos (hayamos nacido en el África negra o entre la belleza caucásica...) independientemente que algunas personas piensen que la religión les da una vida más después de la muerte. Con esto quiero decir (y creo que coincidirás conmigo vos que estás leyendo estas líneas) que la generalidad de los creyentes (salvo algún pirado que siempre hay), que por más vida eterna que crean y sostengan con vehemencia, NADIE quiere morir ya. No, la gente común se aferra a la vida, ni tampoco quiere que se mueran sus hijos o seres queridos. De vuelta; un categórico NO. Creer en la vida después de la muerte es una cosa y otra muy distinta es querer morir y experimentar la vida en que creen. No, el ser humano en general, sea absolutamente creyente y/o tenga una Fe absoluta en que hay vida después de la muerte, quiere vivir y no le gusta la idea de que sus hijos se mueran, o que sus seres quer...

De Valores

Me pidieron el tema. Pensé que me convocaban por algo distinto y me sorprendí. Pero me entusiasmó. Lo preparé en profundidad porque lo tenía en agenda, me lo debía y me hizo aprender. Parte del contenido está en mi libro "Negociar con la vida" pero precisamente eso: parte. Quizás lo más importante de esta presentación esté al final, al responder las preguntas. Creo que allí es donde uno piensa, sólo piensa: http://www.agrositio.com/videoconferencias/cair/diferido.asp

Decidir cortando

Tomar una 'decisión' es hacer un 'corte. Magnifica metáfora. "Decidir" es "cortar". Esto significaría que hay algo que merece un corte. He aquí la cuestión. Es que en toda decisión se pone en marcha un proceso de evaluación de las diferentes facetas de un tema a resolver o de un problema que nos aqueja y después de haber estudiado las múltiples opciones y alternativas que se ofrecen arribamos a destino donde nos espera la acción: 'Decidir' es separar, dejar de lado, en fin cortar. Así lo confirma el verbo latino 'decidiere' que significa 'separar cortando', 'cortar', 'restar', 'acabar', 'zanjar'. Dicho verbo se compone del prefijo 'de-' (de-, dis-) que indica separación y del verbo 'caedĕre' que significa 'pegar', 'cortar', 'talar', 'romper'. Esta es la etimología de la palabra "decidir" que siempre sirve de orientación al significado. Lo que...

Hobbes es algo mas

Tomas Hobbes fue un pensador extraordinario. Vivió 91 años. Lucido hasta el final y sumamente activo. Ya pasados sus cuarenta se convirtió en filosofo. Tuvo una actitud política constante durante toda su vida,  con compromiso y participación publica en su Inglaterra.  Hobbes fue un hombre de letras. Humanista,  protagonista del movimiento que se inicia en siglo 14 y que  estudia la lengua latina y griega para descubrir  una sabiduría especial en los primeros orígenes humanos. Convive con la escolástica. Critica y se interesa por la Educacion (como lo haran tantos filosofos de su epoca como Vives y Erasmo de Rotterdam). Al vivir en Inglaterra estaba comprometido con la Realeza. Se vinculo intelectual fue con Francis Bacon. La obsesión de Hobbes era recuperar un saber perdido. Bacon le enseña un lema que será su leimotiv  en su vida publica: "conocer es poder". No es una declaración técnica sino que implica un cambio que inclusive influyo en Descartes con esta idea que el cono...